Un crimen común de Francisco Márquez pertenece a la familia de Rojo y Planta permanente: películas concentradas en sus temas, políticamente comprometidas (en el sentido más superficial que pueda adquirir esta fórmula) y con tantos problemas para encontrar un punto de vista cinematográfico que terminan, además de por ilustrar laboriosamente sus guiones, por trabajar en […]